Estudio Kyneema / Asociación
Espinosa-Mascot
Presentan
LA DELGADA LÍNEA PARALELA:
D Í
A S G
R I S
E S
Historia: Alan Espinosa M. &
Laura Mascot
Dibujos: Alan Espinosa M.
Color & Texturas:
Laura Mascot
“Sólo aquél que ha perdido
algo muy valioso,
podrá llegar a entender el significado de estas palabras…”.
La habitación está muy fría, el aire es pesado, húmedo,
difícil de respirar.
Las gotas que se filtran por una pequeña grieta en el
techo, al caer en un balde de metal, evitan el silencio absoluto.
No he ido a la escuela en varios días, el Dr. Traven,
me ha diagnosticado una infección viral, la llamó “principios de neumonía”. Tranquilizó
a mis padres al decirles que habían actuado a tiempo, sin embargo, yo me siento
agonizar.
No puedo decir que me gusten las agujas, pero he
preferido que me den inyecciones a permanecer más días aquí, deseo recuperarme
lo antes posible…eso creo…
Para los demás sigo con vida, pero la verdad es que me
siento igual que un cadáver…
La puerta entreabierta de mi habitación me permitió escuchar la voz del Dr. Traven. Casi
en un murmullo recomendó a mis padres que necesito mucho descanso; supone que
me esfuerzo demasiado en ser una buena estudiante, y que eso ha deteriorado mi
salud…si tan sólo supiera…si tan sólo supiera lo que en verdad ha pasado…
Me duele mucho la cabeza, las altas fiebres no me dan
tregua; ya he vomitado varias veces, y la desagradable sensación de que en cualquier
momento ocurrirá otra vez se aferra a mi
cuerpo.
Vi en el semblante de mamá una gran preocupación antes
de abandonar mi alcoba; intento arreglar
un poco mi cabello, pero el reflejo que me devolvió el espejo de mano me reveló
un rostro desconocido, aquella criatura de ojos profundamente tristes no puedo ser
yo, mi cara no es delgada sino enflaquecida, pero…creo que lo que en verdad tengo
resquebrajado, es mi espíritu.
He perdido mucho de mi interés, de mis emociones, mi
vitalidad…todo me parece difuso, sin
sentido, como si mi rededor estuviera cubierto por un fino velillo de color plomizo.
Las ideas pelean entre sí, punzan mi cabeza, se
agolpan en mi mente como sangre coagulada.
¿Quién mueve los hilos que controlan el universo?, si
hay una fuerza superior que todo lo ve, que todo lo sabe, que todo lo entiende ¿por
qué permite que pasen estas cosas?
La lluvia ha sido constante desde hace varios días, me
gustan mucho los días fríos y lluviosos, pero en las condiciones en las que me
encuentro, me parece como si alguien se deleitara con mi tortura.
He visto al menos 3 cortejos fúnebres esta semana,
creo que la lluvia ha hecho estragos en el puente que va al cementerio, así que
la gente se ve obligada a pasar por aquí.
He pensado mucho en la muerte desde aquella noche. De
alguna manera estoy acostumbra a ella, es algo normal para mí, pero no había
pensado en lo quebradizos que somos en realidad, cualquier cosa, por más
pequeña que sea, puede matarnos, o aún peor, mantenernos en agonía durante
días, semanas, meses, años…
He sentido la necesidad de escribir las siguientes
líneas en una hoja de papel que tenía a la mano:
¿Qué es la vida?, ¿qué
objeto tiene?
¿Qué eres tú?, ¿qué soy yo?
Una partícula, un número, un
nombre, nada
¿Al final todo se pierde?
Menos que un recuerdo…menos
que una memoria,
Un espasmo, una infinita
mirada al vacío, un suspiro,
la última lágrima…el último
aliento.
Fugaz, imperceptible, dolor
total, dolor mudo…
¿Qué es la vida?, ¿qué
objeto tiene?
Vacío infinito, dolor
infinito, dolor sin sentido, sin razón,
Dolor con razón, dolor
total, absolutamente mío,
Mis heridas, mi dolor, mi
llanto.
Por otra parte, tampoco puedo dejar de pensar en la
maldad que habita dentro de las personas, todo ese odio, rencor, y perversión
que habita en su mente, todos aquellos sentimientos negativos que no podemos
ver, pero que están ahí, al acecho, esperando, buscando un pretexto para hacerse
presentes.
Me pregunto si dentro de mí también existen ese tipo
de sentimientos. Si es así, ¿por qué brotaron?, ¿qué debo hacer con ellos?, ¿podré
ser capaz de desaparecerlos?
¿Qué tengo que hacer?, ¿con quién puedo hablar?,
¿quién puede entenderme y ayudarme?, no puedo ir con papá y mamá para decirles simplemente
que un grupo de seres vino hace un par de noches y me mostró la peor cara de
las personas de este pueblo, no lo creerían, los aterra escucharme hablar
así…los hace pensar que algo no está bien dentro de mi cabeza, y que necesito
otro tipo de ayuda.
Hasta donde sé, al menos uno de mis…antepasados…ha
estado…enfermo…y terminó sus días en una “Casa Verde”…el lugar donde terminan
los lunáticos e inadaptados, las personas que han perdido la capacidad de
comunicarse “sanamente” con el mundo.
Yo no quiero terminar en una “Casa Verde”, no quiero,
pero, ¿quién podría entender mi mal?, ¿quién puede traer paz a mi alma?
Afuera, la lluvia ha comenzado de nuevo, con angustiosa
dificultad me acerco a la ventana y ahí, en medio del fango de la calle, una
lúgubre figura permanece de pie, inmóvil, impasible.
Tres golpes en la puerta de mi dormitorio me hacen
perder la concentración en la escena, alguien llama…y sé que no es ni mamá…ni
papá.
Continuará.
LA DELGA LÍNEA PARALELA – “DÍAS
GRISES”, 2017. Estudio Kyneema / Asociación Espinosa-Mascot.