Estudio Kyneema / Asociación
Espinosa-Mascot
Presentan
LA DELGADA LÍNEA PARALELA:
I N F E C C I Ó N
Historia: Alan Espinosa M. & Laura Mascot
Dibujos: Alan Espinosa M.
Color y Texturas: Laura Mascot
Ésta noche, para describir lo que me pasa, no
encuentro las palabras…
Lo más parecido, es decir que los demonios, brujas,
monstruos, aberraciones y malos espíritus se han reunido para celebrar un grandioso
aquelarre, y yo soy…su “Árida Montaña”….
Mi propio cuerpo es mi prisión, algo más fuerte que yo
se encarga de tomar las decisiones importantes, vitales, obligándome a permanecer
consiente, pero en agonía, porque en éste momento mi cuerpo es de todos…excepto
mío…
Estoy paralizada, me siento inútil, nada hay que pueda
hacer para detener su invasión; suben, bajan, y reptan dentro de mí, buscando
algo, hurgando y rasguñando; en mi mente puedo escucharlos murmurar entre sí…la
escena es desagradable, terriblemente incómoda y grotesca.
De pies a cabeza, en lugar de sudor, mi cuerpo está empapado
de ésta secreción; cada rincón, cada hendidura…cada hueco…cada pliegue de mi
piel parece estar corrompido por ella.
¿Por qué?... ¿por qué hacen esto?, ¿qué tipo de seres
tienen el poder y lo usan de ésta manera?, ¿y con qué finalidad?, ¿qué obtienen
a cambio?, ¿qué puede ser tan importante?...
Las respuestas no aparecen, por el contrario, veo
aquél par de luces volando a mi alrededor, brillando como fuegos fatuos,
detestables como moscas, silenciosas como una tumba olvidada…
Lo más extraordinario, es ver aquellas luces volar
hacia una esquina de la habitación, y entrar por la boca de un ente, para
después reaparecer en el sitio que ocupan sus ojos.
La criatura avanza por la pared apoyada en sus cuatro
extremidades, y con perturbadora mueca se posa a mi costado, siempre con la
mirada fija, como búho al acecho de su presa…
“Déjalo fluir”, creo escucharle mencionar, aún cuando
sus labios no se han movido, “Es parte de ti, no puedes detenerlo”.
Con humillante lentitud, desliza el revés de su mano por
una de mis mejillas…la piel me arde, aquella mano tan fría, quema…
Acerca peligrosamente su rostro al mío, abre su boca y
comienza a succionar, robando mi aliento…
Siento como la vida escapa de mi viscosa, húmeda y
resbaladiza prisión. El pánico y el dolor se apoderan de mí; tengo la sensación
de estar envuelta en llamas, los latidos de mi corazón se hacen lentos…muy
lentos…en cada palpitación mi mente se nubla más, y más…
Al final, cuando todo
es oscuridad, escucho el fuerte desquebrajar de algo…y soy yo…
Continuará.
LA DELGA LÍNEA PARALELA – INFECCIÓN,
2017. Estudio Kyneema / Asociación Espinosa-Mascot.