martes, 9 de febrero de 2016

Después de la Caída (Relato Post-apocalíptico)



Estudio Kyneema / Asociación Espinosa-Mascot
Presentan 


DESPUÉS  DE  LA  CAÍDA


Historia: Alan Espinosa M. / Laura Mascot
Dibujos: Alan Espinosa M.
Color: Laura Mascot





“Aquí, y en los confines del universo, todo termina.”





I
Después de la tormenta…la desolación

Siete años…

Siete años han pasado...


Finalmente, después de una larga e intensa agonía, “El Sistema” ha colapsado bajo su propio peso; los efectos del alucinógeno llamado “Sociedad” han terminado.

Atrás quedaron los días magníficos de la “gran telaraña de la información”. El día a día del hombre y la mujer “civilizados” no es más que un triste recuerdo caído en el olvido.

Muy lejos están los momentos de confort, cuando la tecnología era la respuesta a las necesidades más básicas.

Sí, casi una década nos separa del “Holocausto Global”, “Los Años Perdidos”; han quedado en el pasado el instante de la última venta y compra, la última broma, la última risa…


Hoy, el paisaje se devela como un desierto sin fin, valle tras valle, montaña tras montaña; ya no hay más dictaduras, sólo rocas y polvo, ya no hay más monarquías, sólo chatarra y escombros, ya no hay más democracias, sólo cráneos y ceniza.

Y es exactamente en esta “postal” de fantasía post-apocalíptica, que toma lugar una historia.






II
La vida en “El Asilo”

Bajo los cimientos de un enorme monolito, rojo como la sangre, en las entrañas de la tierra, existe un lugar secreto, que muy pocos conocen, y del que nadie ha regresado.

Aquí, donde el sufrimiento y el dolor son objeto de estudio, y la vivisección es el camino a la verdad, cualquier cosa puede suceder.

Aquí, donde no existen los límites, y la “compasión” es sólo un término más en la lista de “palabras apócrifas”, la única justicia es de aquellos que blanden las agujas y los bisturís, en nombre del “Renacimiento de la Civilización”…


Aquí, han muerto todos los dioses, y ellos, los hombres y mujeres que conocen los secretos de la vida y la muerte, pueden hacer lo que sea…






III
Sola…en su celda

Despertó…

Por segundos creyó que era un mal sueño inmerso en otro sueño; con la mirada, lentamente recorrió el desconocido lugar; un intenso escozor estremeció todo su cuerpo…la angustia se apoderó de ella, ¡gritó!, pero en lugar de un profundo y agonizante alarido, lo único que atravesó su garganta fue un chillido apagado, imperceptible…

Quiso huir…más no fue capaz de ponerse en pié, el dolor entre sus piernas era terrible, taladrante.

Tocó el área…y supo, que un trozo de su cuerpo había desaparecido, una parte de ella había sido mutilada…extirpada completamente, desde su raíz…


Instintivamente, arrastró su débil y anémico cuerpo, por el frío piso de la celda, hasta un rincón…en su mente, todo era un espacio vacío, infinito, en blanco total.






IV
Hubo una vez…

¿Cuánto tiempo estuvo ahí?… ¿horas?… ¿días?…

En aquél torbellino, físico y mental, sólo anhelaba la muerte… pero entonces, muy despacio, en frecuencias bajas,  florecieron de su memoria veladas imágenes.

En ellas, se veía a sí misma vagando entre escombros, sangre y cuerpos desmembrados,  intentando frenéticamente ahogar el dolor de su estómago hambriento, mitigar la sed que escaldaba su garganta, aliviar la molestia de sus labios aftosos por un despiadado Sol.

En ese momento aparecían, allá en la distancia, los espejismos de un hombre y una mujer en traje blanco y máscara antigás.

Venían hasta ella, ofreciendo alimento y protección, convenciéndola de que con ellos estaría a salvo…

Resonó en su mente un nombre, Sally, el mismo que le etiquetaron sus captores el día de su ingreso en “El Asilo”, el día que su cuerpo dejó de pertenecerle.

Pero hubo algo más, al final de la ronda de memorias perdidas, llegó lo más devastador, un recuerdo único y de valor incalculable; no estaba segura de donde y cuando lo había visto, o si alguna vez había estado ahí, pero sabía de su existencia, la imagen vívida de un lugar magnífico y diferente, opuesto al mundo que ella recorriera desde hacía varios años, un verdadero “paraíso terrenal”.






V
Metamorfosis

Quizás fuera su sentido común de conservación; tal vez la negación casi natural de algunos individuos por su realidad inmediata; ¿o desde el principio, algo había sido diferente en ella?…no lo sabemos.

Lo único cierto, es que algo sucedía en su organismo, quemaba sus entrañas, fluía hacía el exterior deshaciendo su epidermis, carbonizando sus vendajes, cambiando su apariencia y funciones vitales.

Se adaptaba a gran velocidad, con células naciendo y muriendo, neuronas activando cada rincón de su cerebro, dendritas y axones trabajando con majestuosa precisión, haciéndola entender todo aquello que nunca había entendido, creando una versión mejorada de sí misma, un organismo único, híbrido, metal y carne.

Joven por siempre, mientras exista aire en sus pulmones, plasma rojo en sus venas, y su cerebro sepa que hacer.

El nacimiento de un tipo de ser que sus captores no pudieron predecir; denominador común de todos los grandes descubrimientos.






VI
Instintos

Tiene la capacidad física y mental, la fuerza, las herramientas, y un objetivo…nada podrá contenerla.


Y es aquí; en el lugar donde han muerto todos los dioses…que ella creará su propio destino.






VII
¿Alguien quería violencia?

14 años.

14 años estuvo a merced del mundo que la vio nacer, obligada a resistir la vida que le fue impuesta, pero hoy, los papeles se han invertido en este juego perverso.

Quien una vez estuvo abajo, satisfaciendo las inquietudes y obsesiones de otros cual objeto prescindible, ahora conoce los secretos…y aquellos que una vez cortaron la piel sin arrepentimientos, tendrán el privilegio de conocer la respuesta a todas sus interrogantes en carne propia…no hagas a otros, lo que no quieras para ti…






VIII
Alimento para gusanos

Siente estremecer el suelo que pisa, retrocede, pierde el equilibrio.

El concreto se fractura, ¡estalla!, y frente a ella, en medio de un agudo y ensordecedor chillido, aparece una babeante y voraz mandíbula, seguida por un grueso y ondulante cuerpo plagado de orificios, glándulas venenosas.

Entonces, su mente se esclarece, y comprende, que no es la única, existen otros seres como ella, productos resultantes de los más insólitos y aberrantes experimentos, fantasías grotescas hechas realidad, engendros de la naturaleza corrompida, hermanos y hermanas por causa y efecto…hermanos y hermanas…


Es verdad, todos pueden estar unidos por los mismos padres y madres, pero eso, de ninguna manera los hace iguales. Se prepara a luchar; la ecuación es muy simple, aquellos que se crucen en su camino están con ella, o están en su contra.






IX
El hombre de sus sueños líquidos

La cubre hasta el cuello el agua contaminada y maloliente, está muy fría, casi congelada, turbia, enrarecida, pero no existe otro camino, tiene que cruzar, hacer un supremo esfuerzo, es la única manera.


Su verdadero problema, es que no ha pasado desapercibida; él, ha estado observándola desde el lecho del fondo, sintiendo cada vibración de sus movimientos, nadando junto a ella, bajo el agua oscura, esperando el momento…esperando.


Ella entiende que ha sido inducida hacia una trampa letal, cuando su depredador apoya, en uno de sus hombros, la viscosa y húmeda mano.






X
Pesadilla alada

Corre tan aprisa cómo sus piernas se lo permiten, sabe que está en peligro, que tiene que moverse, no hacerlo, significaría la muerte…y también sabe, lo mucho que su perseguidora necesita un huésped, un organismo vivo donde depositar sus larvas.


El zumbido, el batir incesante de las alas, es cada vez más fuerte, cada vez más cerca.


La percibe, ¡está ahí!, ¡ahí!, descendiendo desde las alturas, preparando la punta de su aguijón, precipitándose sobre ella con violencia.






XI
El Taladro

Casi puede respirar el aire del exterior, está segura, la salida se encuentra más adelante, esperando por ella para devolverla al mundo, verla nacer de nuevo.

Sin embargo, la pesadilla no ha terminado aún, queda un reto más por superar, el último desafió, la prueba definitiva.

La tierra a sus pies se estremece una vez más, con cada paso, en una carrera desenfrenada, un animal furioso a toda marcha, incontenible, listo para envestir, triturar lo que encuentre en su camino, perforarlo, atravesarlo una y otra vez, hasta convertirlo en un pila de carne irreconocible.

El temible sonido del metal girando, a gran velocidad, lo invade todo; Sally, siente el correr de la adrenalina por todo su sistema, su corazón latiendo con fuerza, no piensa ceder, no ahora, no después de todo lo que ha pasado; luchará, ¡luchará!, siempre lucha…siempre.






XII
Un nuevo amanecer

Puede sentirlos, la fresca brisa de la mañana dando sobre su rostro, el viento suave del nuevo día tocando su cuerpo, el Sol que nace en el horizonte calentando la tierra que pisa. Se siente viva una vez más, ¡viva!, sabe que está fuera.

Lo ha conseguido; después de tantas pruebas a su resistencia, tanto dolor, finalmente, tiene un momento de paz, un momento para ella misma, el momento en el que todo lo vivido no debe ser más que el recuerdo de una noche de insomnio, un mal sueño…


Sí, hoy hace un buen día…un magnífico día…y el valle que se extiende frente a ella parece llenar de expectativas su agotada existencia, llamar a las posibilidades de un nuevo comienzo, una vida nueva, una vida mejor…tal vez, aún existan motivos y razones para creer que es humana…






XIII
La batalla continúa

Están hambrientos, sus ojos voraces la miran, no razonan, el instinto es su única ley.

Criaturas que en tiempos mejores fueron habitantes de las grandes ciudades del mundo conocido; aquellos pocos que creyeron estar a salvo del caos, y que ignoraban por completo los efectos secundarios, a largo plazo, de lo sucedido; ahora, no son más que una grotesca parodia de lo que una vez fueron.


Es verdad, la tiene rodeada, la superan en número, algunos en tamaño y fuerza…pero eso no significa que esté vencida; no, luchará, ¡luchará!, siempre lucha…siempre…después de todo, ahora sabe quién es ella, ahora, está segura de cuál es su nombre.

Sí, ella es Sally… ¡Sally!, así llamada por sus captores…Sally, “La Descuartizadora”.



FIN


DESPUÉS DE LA CAÍDA, 2015. Estudio Kyneema / Asociación Espinosa-Mascot.


5 comentarios:

  1. Me ha gustado mucho la historia amigos, es bastante entretenida y las ilustraciones, no podrían ser mejores, exactamente en sintonía con lo que se supone, debe reflejar la narración.
    Muy interesante el formato de micro-relatos, te da la impresión de ser solo la introducción del cuento, pero en realidad, te deja satisfecho y con el deseo de seguir leyendo hasta el final.
    ¡Exelente trabajo el de ustedes! ¡Sigan asi!


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    1. ¡Hola spear sleepy!, escuchar que ésta historia te dejó satisfecho como lector nos hace sentir muy bien, la idea era conseguir un texto dinámico, que no fuera cansado en su lectura, y fácil de entender. Una vez más, gracias por el tiempo invertido en el análisis de nuestras propuestas, sabemos que tu agenda está un poco ocupada. Seguiremos trabajando en nuevas historias. ¡Saludos, buen fin de semana! :-)

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  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  3. Buena historia, excelente puesta en escena a modo de comic, continuará tras continuará... Interesante!

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    1. ¡Hola David, muchas gracias por comentar!, estamos difundiendo varias historias, para ver cuales son las que más llaman la atención del público; las que que tengan mejores resultados son candidatas a una continuación; por ahora te podemos decir, que ésta es una de las más populares. ¡Saludos! :-)

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